La llegada del Estado Social

Claudio Palavecino 30 Mar 201730/03/17 a las 17:01 hrs.2017-03-30 17:01:30

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Última Modificación 30 Mar 201730/03/17 a las 17:01 hrs.2017-03-30 17:01:30
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  • Ilari Ahumada K.

    3 May 201703/05/17 a las 14:39 hrs.2017-05-03 14:39:03

    Cuestiono profundamente dos cuestiones expuestas, que no guardan una relación directa entre sí, y estas son: a) la libertad vista como algo positivo per se; b) El aumento de la producción considerado como crecimiento económico. a) En primer lugar, encuentro que no se puede considerar como bueno en sí mismo, el que “se ofrezcan espacios de no intervención en nuestras decisiones y reclaman apenas la intervención de los demás”. Por una parte, creo en la complejidad de las relaciones en las que nos desenvolvemos, donde normalmente la igualdad entre los sujetos es la excepción a la regla. En nuestro espacio las asimetrías de poder e información son frecuentes, lo que deviene en un abuso de una parte a otra, es por esto que el Estado tiene un rol importante como regulador y guardián de los derechos de las personas. Incluso los mismos neoliberales, muchos más sensatos que Hayek, están a favor de muchas instituciones o leyes que regulan el mercado, como podría ser el Banco Central o la misma ley antimonopolio. Por otra parte, y esto tiene que ver con una cuestión más filosófica, la libertad por muchos ha sido entendida como algo positivo. Pero el afirmar que la libertad individual va en contra de la comunidad, a la cual el ser humano debe su origen y su supervivencia en la actualidad. La libertad sin restricciones es algo negativo en el fondo, es hacer lo que yo quiero, porque puedo disponer como yo desee de mí accionar. Esto es totalmente contradictorio con la evolución que ha llevado el ser humano, donde el someterse a ciertas reglas en común y trabajar en equipo le ha permitido crecer. b) En segundo lugar, es cierto que los derechos sociales no generan un aumento en la riqueza inmediatamente, pero esta tesis tiene que superar dos pruebas. Primero esto es va a ser válido solo cuando por riqueza se entienda una cuestión monetaria, es decir, el aumento de la cultura por sus características no es cuantificable en un período de dos años luego de impuesta la medida, o es muy difícil de cuantificar en utilidades generadas. La segunda prueba dice relación con, si es tan cierto que la implementación de derechos sociales como la educación no pueden reportar un beneficio económico. La hipótesis nuevamente solo será cierta cuando se considere la inmediatez de la ganancia reportada, porque no se puede ignorar que un país con una mayor mano de obra calificada produce mucho más que uno que no la tiene y también que, hoy en día, la producción intelectual es uno de los factores que suma mayor valor agregado. En fin, quedan atrás las teorías que propugnan el crecimiento económico como un sinónimo del aumento del PIB, ya que el primero debe significar un beneficio, una cuestión positiva para la comunidad, aumentando tanto los factores cuantificables a largo, mediano y corto plazo, así como también los valores de carácter cualitativo que pueda plantear la humanidad, en un horizonte moral. Mientras que el segundo es solo un término de carácter técnico, el cual aumenta con la compra de manzanas como con los accidentes del tránsito, el narcotráfico o los bombardeos en medio oriente.